Uno de los efectos de la pandemia fue el cierre de los establecimientos educativos, incluidos los jardines infantiles, y las restricciones de uso de los espacios públicos destinados al juego y la recreación de niños y niñas. Muchos de ellos vieron interrumpidas sus actividades habituales al aire libre, importantes para su desarrollo y aprendizaje. Estimular y promover la habilitación de espacios seguros al aire libre para niños y niñas es un nuevo desafío para las comunidades educativas, a fin de dar continuidad a las experiencias de aprendizaje en un contexto con menor riesgo de contagio.

Como respuesta a esta necesidad, se implementó el proyecto piloto “Habilitación de espacios educativos al aire libre”, que considera la habilitación de áreas con módulos de madera de diversos tamaños, muros de escalada y lugares para actividades educativas al aire libre, con sus respectivos puntos de higiene para prevenir el contagio por covid-19. Esta iniciativa beneficia a 11 jardines infantiles JUNJI de la Región Metropolitana de las comunas de Buin, Lo Espejo, El Bosque, San Joaquín y San Miguel.

El proyecto “Habilitación de espacios educativos al aire libre” es una iniciativa de UNICEF en alianza con Fundación Mi Parque, con financiamiento de Google.org y en colaboración con la Junta Nacional de Jardines Infantiles (JUNJI). Esta experiencia busca relevar la importancia que tiene el juego al aire libre para el desarrollo y las posibilidades que estos entornos entregan para el aprendizaje de niños y niñas, considerando el valor que tiene el aire libre como prevención para el contagio de Covid-19 y de otros virus que circulan principalmente durante el invierno.