- Fecha actividad: 15 de diciembre 2015
- Superficie: 3.297 m²
- N° estimado de beneficiarios: 1170 personas
- Patrocinador: Cuprum AFP
El Parque Oro Olímpico comienza su construcción el año 2012, donde se inaugura la primera etapa. Después de 4 años, se logra la construcción de la segunda etapa y la tercera, esta última era el paño más grande, con más de 3.000 m². Los vecinos del barrio estaban expectantes, fueron muchos años de espera y con el sueño de cambiar su barrio, convivían en un terreno vacío donde sólo había árboles en un parque. Una característica particular de la comunidad, es su motivación e interés por las áreas verdes, si bien contaban con cierta vegetación, eran los mismos vecinos los que se preocupaban por su mantención y por plantar y cada uno de ellos tenía frente a su casa su jardinera.
De esta forma, parten los talleres de diseño participativo donde se realiza un análisis del terreno en conjunto a los vecinos, en el que se reconocieron los aspectos negativos del terreno, aspectos positivos y anhelos que querían ver plasmados en la plaza, según los usos e intereses de la comunidad. A modo de resumen, se priorizaron las siguientes decisiones: Dejar un espacio central de encuentro que incluya sombra, juegos infantiles para todas las edades que estuvieran distribuidos a lo largo de todo el parque, juegos inclusivos y novedosos. Mejorar los accesos, que se incluyera una rampla, circuito para bicicletas y paseo peatonal, mejorar y aumentar las áreas verdes y mantener o consolidar los estacionamientos existentes.
En primer lugar, se rescató un entramado de árboles y plantas que la misma comunidad había plantado años atrás. De este modo, la primera decisión fue respetar estos árboles y plantas, poniéndoles un valor e incluyéndolas en el nuevo diseño. Junto con ésto, se mejoraron los accesos y se dejó un recorrido perimetral formando un circuito para bicicletas y un paseo peatonal. A través de pircas se generaron asientos que miran a un gran espacio central, donde hay juegos infantiles, una explanada multiuso y zonas de pasto. Las áreas verdes se desplazan al perímetro siguiendo el patrón establecido por los mismos vecinos y fortaleciendo el espacio central multiuso y el circuito de bicicletas.
Respecto a los juegos que ya habían, se trasladaron de lugar y se complementaron con juegos nuevos. La comunidad demostró inquietud por incorporar juegos inclusivos, se propuso un columpio hamaca, fácil de usar para todas las capacidades motoras. También se incluyeron juegos para jóvenes, como una barras deportivas y una mesa de ping pong. Como la plaza ya contaba con juegos tradicionales, se propuso incorporar juegos más sensoriales de maderas, para fomentar nuevas maneras de jugar que aluden a la creatividad de los niños. Se instalaron troncos escalables y troncos de equilibrio que fueron bien recibidos por la comunidad.
En relación a las áreas verdes, al percibir el interés de los vecinos por las especies vegetales, se realizaron talleres donde se identificaron las especies utilizadas en las etapas anteriores del parque, donde se reconoce la adecuación de éstas al clima de Colina, la baja mantención y valor estético. De esta forma, se llega al acuerdo de reutilizar estas especies, manteniendo una imagen homogénea en todo el parque. Para facilitar el riego, se instaló un acople rápido para acortar la distancia desde el medidor.
La comunidad en general fue un buen aporte y hubo muy buena participación en todos los talleres. Sienten una apropiación considerable respecto al parque, tanto así, que sienten la libertad de modificar el diseño, instalar juegos o mobiliario y poner plantas a su parecer.
